Crear algo y poder compartirlo no tiene precio. Especialmente cuando conocemos personas que comparten nuestra misma pasión. Y así como nos hace felices, también nos puede ayuda a curar y crecer…
Aunque lo hayamos olvidado ya… todos hicimos manualidades y scrapbooking alguna vez. Cuando éramos pequeños quizás en casa, en la escuela, con nuestros abuelos o con amigos. Todos en algún momento hemos disfrutado de crear. Seguramente, si ya lo están pensado, el primer material que se les viene a la mente es el papel. Aquel que en blanco y frente a nosotros puede ser el medio perfecto para expresar lo que sentimos. Puede no parecerlo, darnos miedo o no saber qué hacer con él. Pero si lo miramos bien sabremos que es una posibilidad infinita para mostrarnos y crear. Crear con el presente, con el pasado y también con el futuro.